sábado, 9 de agosto de 2014

Nicaragua - León

Sábado 9

Partimos temprano desde El Salvador, porque hoy teníamos que cruzar dos fronteras: Salvador-Honduras y Honduras-Nicaragua. Llegamos tempranito a la primera. Obviamente nos esperaban los miles de -insistentes es decir poco- "amigos" que nos querían ayudar con los trámites. Y la razón más obvia, viajamos con patente de NY. Salir de El Salvador un trámite, entrar a Honduras: infinitos. Si usted piensa viajar a Honduras le recomiendo francamente llevar su propia fotocopiadora. Llegas con las fotocopias de los documentos originales, entonces le ponen un timbre y te exigen nuevas fotocopias. Cuando llegas con ellas le ponen un nuevo timbre, y de vuelta a la fotocopiadora. Y lo peor es que no es talla, fui 5 veces a la fotocopiadora, y eso que llegue en un comienzo con fotocopia de todos los documentes. Después, cuando crees que terminaste toca ir al banco. Pero ojo, el banco no recibe los documentos si no le llevas 4 hojas calcos. Finalmente logramos de hacernos el ánimo y salir de ahí para que el "amigo" que a pesar de ser rechazado en varias ocasiones nos seguía acompañando nos hace la siguiente oferta: "más adelante le van a cobrar 22 usd por -fumigar- su vehículo. Mi amigo, que trabaja al lado puede ponerle el timbre por 10 usd y más encima no tiene que esperar". A esa altura estábamos muy cansados, y no queríamos perder más tiempo y plata, así que pensamos la oferta. Pero luego decidimos que Dios premia a los buenos, y que después de haber pagado harto por entrar no nos íbamos a cagar en 10 usd así que íbamos a pasar oficialmente por fumigación. Para nuestra sorpresa, no existía tal fumigación (en otras aduanas si nos había tocado fumigar), así que en conclusión: Dios premia a los buenos.

Con el fin a ese trámite empezaban los 130km de camino por Honduras hacia la frontera con Nicaragua. Honduras se caracterizaba, según leí en algunos blogs, por la policía corrupta que te para en el camino, revisa el auto completamente y te multa por cualquier cosa...triángulos, extintor, lo que se les ocurra y que tu no tengas. Aparte, nos es un país del top 10 de seguridad. Así que partimos medios nerviosos con ganas de pasar el camino lo más rápido posible. Es así como nos colgamos a una caravana de autos de el salvador que llevaban turistas que iban rápido. Cuando veíamos policías a la distancia nos pegábamos a ellos. Varias veces la policía se quedaba viendo el auto...pero demasiado tarde, ya habíamos pasado.

Llegamos a la siguiente frontera a las 12:15, hora donde "los compañeros" almuerzan. Esperamos un rato y finalmente con todos nuestros papeles cruzamos a Nicaragua, donde sí nos fumigaron. Pasamos la aduana y gracias a muy buenas carreteras, llegamos a León (gran nombre para una ciudad), donde encontramos un hotel donde quedarnos. Almorzamos tipo 4 y nuevamente llegó nuestra amiga la tormenta, transformando las calles en ríos.

La recepcionista del hotel, una muchacha joven, había estudiado turismo así que junto con encariñarse con JJ, nos ayudó a planificar el resto del viaje. Cabe destacar que JJ está echo un balazo para gatear, y por lo mismo, peligro público. No discrimina sillas, mesas o escaleras, y pasa soplado por donde sea. Siempre manteniendo su alegría característica eso si, la que hace amigos en todos lados, incluidas aduanas chantas y tramitadoras. 

1 comentario:

  1. Oye, sin juanjo no hubieran conseguido nada en este viaje! debieran arrendarlo a la gente que viaja por latinoamerica.

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